ha estado en la familia por ocho generaciones.
Todos quienes podemos llamarnos adultos podemos manejarlo y repararlo (algunos incluso saben como mejorarlo cuando tengan las piezas y hay un taller especial donde se preparan, pero es un trabajo lento). Todos nosotros sabemos tambien como recoger efectivamente los despojos y seleccionar lo que nos sirve, consultando las listas y ordenando lo que encontramos en diferentes recipientes dependiendo de la calidad.
No es una vida facil para las mujeres. Solía ser una vida solo de hombres, mientras laqs mujeres se quedaban en las casas, enseñando sobre mecánica y selección, y cocinando. Pero desde que hubo emergencias y varias mujeres se convirtieron en grandes heroinas de la familia, todos salimos por turnos, todos cocinamos, todos enseñamos. Por dos generaciones quizas hubo descontento, pero ya no hay nadie que recuerde realmente como fue antes. Y como vemos que es bueno para todos, seguimos así.
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