domingo, 28 de octubre de 2012

Mientras se encontraba en esa posición donde pasas tu brazo por entre las piernas mientras estás en cuclillas para limpiarte le culo con el grifo de la tina cuando el asesino apareció en el marco de la puerta. En ese momento pensé, dios, si existes y me salvas de esto, dejaré de ser un espía y contaré esta historia todo el tiempo.
Quizas es porque dios aprecia mucho la comedia, o el universo necesitaba de un comediante de stand up en vez de un cadaver con la cabeza agujereada y el culo con jabón.
Uno nunca pordrá llegar al suelo tan rápido lanzandose voluntariamente como uno llega al caerse. Agrega jabon y agua caliente. Y si bien una bala es más rápida que eso, un dedo tiene que apretar el gatillo más rápido para que salga. Pedazos de baldoza recien explotados sirven bien como proyectiles y una tina es un gran parapeto. Un baño alfombrado, si bien antihigienico permite correr con los pies mojados.
Es dificil pelear desnudo. Sin importar que tan pequeño sea el pene de un hombre, al estar desnudo frente a otra persona, la otra persona puede ver muy claramente un punto muy debil, y tiene muy facil acceso. Con esto no me refiero a que mi pene es muy pequeño, era solo para decir que es patente lo fragil que uno se siente. No diré tampoco que mi punto debil sea especialmente vulnerable por su gran area. Es normal. Quería dejar eso claro. Es dificil pelear con un hombre o con una mujer. Jadear, apretar, empujar a otro mientras tienes conciencia de tu pene produce sensaciones extrañas. Ecos, podríamos llamarlos. Aprehensiones en ciertos casos.
La verdad lo que cuento en este lugar no es muy gracioso. Pero no soy un hombre gracioso. Solo se reconocer la gracia en lo que dicen otros y puedo repetirlo, porque tengo una memoria privilegiada.
A continuación, nociones divertidas que he robado a otra gente en estos años de eztraña profesión.