miércoles, 9 de diciembre de 2009

Natalia

siempre me gustó. Tenía 15 cuando la conocí y yo 17 y era amiga de mi polola. Pero incluso si no lo hubiera sido, me hubiera gustado. Su color de piel como casi tostado, sus ojos medio de gato y su boca gruesa eran siempre muy atractivos. Y se suponía que a ella siempre le gustaban los pololos de la Sara.

Salimos con ella y la Sara un par de veces y era divertida. Cuando nos juntamos a ver el aro en su casa, fuimos con mojo y con joke. Y estabamos yo-sara-joke-mojo natalia. Mojo agarraba con la natalia y joke decía "Odio mi vida" y todos nos reíamos, hasta el, y seguiamos en esta actitud de orgía softcore.

Y después la Sara sepeleó con casi todas sus amigas. Parece que la magia negra tuvo que ver con eso un poco. Y que la natalia tuvo una polola que no le caía bien a nadie.

Como hace 2 años ella y freddy caminaban por la calle en la alameda y nos la encontramos con la jose. Casi no hablamos.

Y cuando me cambié a suecia, siempre al llegar o al irme hacia irarrazaval creía que me la iba a encontrar. Porque antes vivía por ahí. Y claro que lo hice y sigue viviendo por ahí. Gorda y embarazada, me cuenta que no hace nada "estoy embarazada, este es mi pololo". Y no lo vi venir, en realidad. Algo de conversación honesta, sin ilusiones de que nos volveríamos a ver, nos despedimos.

Tres reflexiones después me di cuenta que este encuentro es una anecdota que no le iba a contar a Felipe.

No hay comentarios:

Publicar un comentario