viernes, 13 de abril de 2012

Llueve afuera

y no es tan buena idea salir todavía. Igual lo voy a hacer, pero tengo una polera y mis zapatitos de gamuza, y me voy a pasar.

Esta ha sido una semana de juntarme con grupos y pedazos de grupos y de celebrar. Estamos contentos. Somos relativamente jovenes bonitos sanos. Me voy.

Me dio mucho miedo pensar en irme. Me dio y luego me vino la sensación de libertad. Ahora si puedo hacer todo. Ahora que me muero para esta ciudad, puedo recorrerla de noche de nuevo, colarme a cumpleaños de nuevo, wevear a la gente de manera chistosa, curarme durante la semana.

Ya no importa.

Y se puede mantener un ritmo de novedad y despedida por un rato largo?

Sería choro.

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