lunes, 26 de octubre de 2009

I can measure out my life with coffee spoons

o con platos de comida, en realidad. Cada vacación y cada momento de viaje ha girado en gran medida en torno a las comidas y en esta ocasión, no fue tan diferente. Diferentes tipos de sushi y langosta y Jackfruit fueron los reyes de lo nuevo.

Y claro, lo otro de los viajes que es en lo que me centro siempre, es la gente. Y hablamos con un par, y nos contaron que pasaba y que era la ciudad.

Y siempre todo lo que uno vive se trata de uno, porque lo demás son simples arboles que caen sin que nadie los oiga, y si bien la vibración del aire debe estar, dicen, el sonido es algo completamente diferente.

Volví a querer viajar. No como antes. No como pensé que me gustaría mi vida, pero facilmente podría transformarse en eso. Acaso no es nuestro objetivo ser la plasticina de nosotros mismos?

El proximo año a california a encontrarme con el monstruo que me acordará de ti, y bautizaré con tu nombre. Y después, quien sabe. Bilbo y lucibel hablaban de llegar al final de un camino para toparse con una bifurcación. Y cada dia bifurcaciones, y elecciones.

Y en general es verdad que una "elección de la vida" es mucho menos frecuente de lo que podría ser, pero es solo por nuestra costumbre. Que nos impide canjear a nuestros amigos e irnos a vivir a paraguay? Que me impedía realmente robarme la plata de la empresa y arrancarme a la casa de la gen? Miedo, obviamente, pero probablemente otras cosas.

Muchos libros nuevos. nueva voluntad. Sorpresas al llegar.

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